sábado, 9 de julio de 2016

El parking de Radovljica

Una cosa típica de los viajeros es sacar conclusiones rápidas sobre las características del pueblo visitado: "eminentemente agrícolas", "reservados", "cantarines", "expertos en repostería", "con una sorprendente afición común a trabajar como bomberos"... puede uno decir sin dudarlo de TODOS los eslovenos tras una semana en este pequeño país.

Algo hay de todo eso, pero no todo, ni mucho menos de TODOS.

Es un país de gente educada, por ejemplo con papeleras públicas que invitan al reciclaje mediante la separación de tipos de basura; pero es frecuente ver motoristas sin casco, al menos en los pueblos, y como se puede apreciar en la imagen calculan con magnanimidad el peso medio de las personas.

Un detalle: en casi todas partes cobran por aparcar. Y no me refiero a las zonas turísticas de las grandes ciudades, sino a los más pequeños pueblos. Cobran el parking hasta en el monte. Una curiosa excepción es Radovljica: en esta pequeña ciudad de unos 6.000 habitantes dejan aparcar gratis durante dos horas. Al aparcar debes dejar en algún sitio visible del salpicadero un papel con la hora en la que dejaste el coche. ¿Se puede alguien imaginar algo semejante en algún lugar de España? Pues eso.

Y quede claro que si dejas el coche sin papelito te multan, si te pasas de las dos horas te multan y si te pasas de listo también te multan. ¿Afán recaudatorio?

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